Al menos noventa y ocho palestinos murieron y más de 600 resultaron heridos por los cuatro días de bombardeos, navales terrestres y aéreos de la operación militar israelí­ "Filo Protector", sobre la Franja de Gaza, informó por Continental Mohammed Odeh, presidente del Comité de América Latina dentro del Movimiento de Liberación Nacional de Palestina. Las últimas ocho ví­ctimas perdieron la vida en la madrugada de hoy durante los ataques de aviones y embarcaciones de guerra de Israel contra unos 50 objetivos en distintos puntos de la Franja. 

Entre los objetivos figuraban cuatro viviendas, una de ellas cercana a un túnel en el sur de Gaza, precisó la emisora pública israelí según información de fuentes palestinas. Por su parte, el Ejército israelí­ emitió un comunicado en el que indica que en las últimas 24 horas atacó alrededor de 210 lugares que relaciona con actividades de "grupos terroristas". Además, Israel dijo que atacó alrededor de 1.090 objetivos por mar y aire desde el inicio de la ofensiva. 

Las organizaciones armadas palestinas en la franja lanzaron unos 200 cohetes, intensificando por su este tipo de acciones contra las poblaciones israelí­es. Con estos cohetes son cerca de 550 los que fueron disparados contra suelo israelí­ en cuatro dí­as, precisó una nota militar israelí que responsabilizó a Hamas de los mismos. 

Las Brigadas Azadin Al Qaassam, brazo militar de Hamas, asumieron la autorí­a del lanzamiento de decenas de cohetes disparados contra poblaciones israelí­es, así­ como los lanzados en las últimas horas. Más de 30 proyectiles fueron disparados por la mañana contra localidades del sur de Israel, informó la radio pública, que aclaró fueron alcanzadas ciudades como Rishon Letzion, Ashkelón y Ashdod, aunque varios cohetes fueron interceptados por el sistema antimisiles "Cúpula de Hierro". 

En Ashdod tres civiles israelíes resultaron heridos al impactar un cohete en una estación de servicio. Asimismo, uno de los dos soldados israelí­es heridos ayer por el impacto de un proyectil de mortero se encuentra internado en un hospital en el sur de Israel en estado grave.