Argentina cayó en el estadio Maracaná por 1-0 ante Alemania en la final de la cita máxima y aunque el objetivo máximo no se cumplió cerró en Brasil su mejor Mundial en 24 años: un subcameponato para destacar por la entrega de un equipo que dejó todo y que en la última bola cayó, tal vez de manera injusta por lo hecho durante el partido, ante el mejor equipo de la Copa.

El gol de Mario Götze en el minuto 112 fue un golpe de KO para el equipo de Alejandro Sabella que en el minuto 10 del segundo tiempo se vio privado de contar con un claro penal sobre Gonzalo Higuaín por la acción desmedida del arquero Manuel Neuer que podría haber cambiado la historia de la final.