Germán Lauro escribió su nombre en la historia grande de la historia argentina en los Juegos Olímpicos. Fue la primera vez que un atleta nacional accedió a la final del lanzamiento de bala, en la que terminó sexto y, además, rompió el record argentino tres veces en todo el día.

"Siento una alegría terrible, no entiendo nada estoy feliz por todo lo que está pasando", había dicho el atleta oriundo de Trenque Lauquen, , al conseguir entrar en la final. "Veníamos trabajando muy bien, por suerte salió un buen tiro en el último", agregó.

De los doce que entraron a la final, Lauro logró pasar el primer corte, que eliminó a cuatro competidores, y quedó entre los ocho mejores con un marca de 20.84 metros, record histórico argentino. Fue esa marca la que le permitió terminar sexto en la especialidad y conseguir diploma olímpico.