El presidente de Quilmes, Aníbal Fernández, criticó en la noche del martes la gira de Boca Juniors por Venezuela y destacó su predisposición para atrasar el horario del partido del sábado, debido a los inconvenientes del plantel "Xeneize" para regresar a la Argentina.

"El partido se corrió para las 18.15 y los motivos son las complicaciones que tiene Boca. Nosotros explicamos que no nos parecía razonable este cambio porque no tiene sentido ir a jugar un amistoso con All Boys en otro país. No tiene sentido ni seriedad una discusión de estas características", argumentó el titular del club quilmeño en rueda de prensa.

Y continuó: "El martes pasado le propusimos a Boca cambiar el horario del partido y ellos no habían aceptado. Las instituciones tienen la obligación de tener buena relación y debimos encontrar una salida para que Boca juegue más tarde".

"Demostré que tenía vocación de cambiar el horario desde un primer momento. Ya me han llamado miembros de la seguridad para confirmar que el partido se juega a las 18.15. No nos cambia la vida ese horario, pero nos parece que tenemos que ser contemplados de la misma manera", remarcó el dirigente.