“El traspaso nunca se concretó, lo que se firmó fue un pedido de negociación de 90 días para que después de ese período nos pusiéramos de acuerdo en las condiciones” de ese traslado de una órbita a otra, remarcó la vicejefa de gobierno de la ciudad de Buenos Aires, en consonancia con la decisión de Mauricio Macri de rechazar la administración total de los subterráneos y el Premetro.

“Era esencial que nos pusiéramos de acuerdo sobre las inversiones y las obras que hay que hacer”, dijo la funcionaria, tras advertir que “todos sabemos que faltan frecuencias, que algunas líneas, como la A, tiene 90 años y no hubo mantenimiento suficiente; es conocido por todos los usuarios”.

“El jefe de gobierno le pidió una audiencia a la presidenta en varias oportunidades pero eso nunca ocurrió”, enfatizó en Antes que Mañana.

Vidal advirtió que fueron convocados a Planificación “para destrabar” el conflicto por el traspaso y “mientras eso ocurría, (la ministra de Seguridad de la Nación, Nilda) Garré anunciaba que a partir de mañana se quitaba la presencia policial en los subtes”.

La funcionaria recordó que al gobierno nacional “se le avisó en público y en privado” que podían tomar esta medida y remarcó: “esto no es un caso aislado, pasa también en el servicio de trenes y en Aerolíneas Argentinas”.

Asimismo, Vidal aseguró que la gestión porteña sigue “apostando a que se retome el diálogo” y resaltó que “hasta el momento del traspaso, los problemas que el Estado tenga con Metrovías (administradora de los subterráneos) debe resolverlos con la empresa. Nosotros empezamos a trabajar desde el momento en el que se concreta el traspaso”.

“Queremos hacernos cargo pero llevarle tranquilidad a los vecinos: si lo hacemos, será como corresponde”, sintetizó.