Luego deL alerta que el Episcopado lanzó hace dos semanas sobre el avance del narcotráfico y la complicidad del Estado con ese tipo de delito, el gobernador Daniel Scioli se reunió con la curia bonaerense para mostrarles, el trabajo que realiza la provincia al respecto.

Tras la reunión, el gobernador bonaerense resaltó que se trató de "una oportunidad de diálogo y reencuentro" y agradeció el documento de la Conferencia Episcopal al que consideró "como un aporte para tomar conciencia y no como una acusación".

Del encuentro, que comenzó a las 11 aproximadamente, participaron, sobre todo, los titulares de las principales diócesis del conurbano, que formaron parte de la redacción del documento del Episcopado en el que se consideró que desde el Estado se hace "poco o nada" para combatir el letal avance de las drogas y que se evidencian las sospechas de eventual connivencia con las organizaciones delictivas.

También estuvieron presentes el ministro de Seguridad provincial, Alejandro Granados, de Justicia, Ricardo Casal, y de Salud, Alejandro Collia, y el secretario de Culto, Enrique Moltoni, quien defendió la política provincial.

Scioli coincidió con los obispos en que "sólo no puede nadie" contra la droga y que "la solución va de la mano de acciones que ataquen las causas profundas, desde la salud, la educación, la cultura, el deporte y los valores familiares, y no de militarizar el debate". "La esencia de la Iglesia es prevenir", afirmó en la reunión.