"El personal de esta policía provincial se dirige a la comunidad de nuestra querida Caleta Olivia (...) [porque] se decidió levantar la medida de fuerza adoptada, en un acto de buena voluntad, a los efectos de destrabar el conflicto. Nuestra intención es abrir un canal de diálogo".

Después de una semana de acuartelamiento en reclamo de mejoras salariales, la policía de Santa Cruz con base en Caleta Olivia comunicó que levantó la medida de fuerza con un "parte de prensa" difundido anoche.

Los cerca de 200 efectivos aclararon que el reclamo era "netamente salarial" y que tienen la garantía del gobernador Daniel Peralta de alivianar posibles sanciones disciplinarias.

El acuartelamiento de un grupo de efectivos de la policía santacruceña se había sentido con intensidad en Caleta Olivia y en algunos sectores de Río Gallegos. La medida no se había extendido al resto de las localidades, pero durante días tampoco se había descomprimido.

El viernes último, el gobierno de Peralta denunció ante la justicia federal a decenas de policías por el delito de sedición, en tanto que las fuerzas nacionales de la Gendarmería y la Prefectura comenzaron a patrullar la localidad del norte santacruceño.