El Tribunal Oral Federal de Mar del Plata condenó hoy a prisión perpetua a tres militares por los crímenes de lesa humanidad cometidos en Monte Peloni, centro clandestino de detención que funcionó en el marco del circuito represivo Tandil-Azul-Olavarría durante la última dictadura. Los condenados a perpetua fueron el ex coronel Ignacio Verdura, el ex sargento Omar "Pájaro" Ferreyra y el ex capitán Walter Grosse, mientras que el cuarto acusado, el ex teniente primero Horacio Rubén Leites, fue sentenciado a ocho años de prisión.

Todos ellos fueron acusados de una veintena de casos por torturas y homicidios contra 21 personas, en su mayoría militantes de la agrupación Montoneros, 15 de los cuales sobrevivieron, cuatro están desaparecidos y dos fueron asesinados.
 
El juicio, a cargo de los jueces Roberto Falcone, Néstor Parra y Mario Portela, empezó en septiembre pasado, dos meses después de la recuperación de Ignacio Hurban, nieto de la presidenta de Abuelas de Plaza de Mayo, Estela Carlotto.

Monte Peloni fue el centro clandestino de detención que funcionó entre 1977 y 1978 a 20 kilómetros de Olavarría, cabecera del circuito de represión de la zona 124.

Los representantes del Ministerio Público Fiscal y de la querella de la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos (APDH) habían pedido prisión perpetua para Verdura, Grosse y Ferreyra, tal como resolvió tribunal, y 25 años para Leites.

Durante este juicio se investigaron privación ilegítima de la libertad, tormentos y homicidio calificado, cometidos en el circuito represivo que comprendía los centros clandestinos de detención Comisaría de Olavarría, Regimiento de Caballería de Tanques 2 "Lanceros General Paz" de Olavarría, Brigada de Investigaciones de Las Flores, Monte Peloni (Sierras Bayas de Olavarría) y "La Huerta" de Tandil.

Verdura tuvo a su cargo el Regimiento "Lanceros General Paz" y por ello se encontraba a cargo del Área 124.

La fiscalía lo tildó de "dueño y señor de la vida de los detenidos", pero en la instrucción el ex militar negó todas las acusaciones y se defendió diciendo que eran declaraciones de "integrantes de la célula terrorista descubierta en Olavarría, juzgados y condenados por el Consejo de Guerra".

Se le imputaron los homicidios de Jorge Oscar Fernández, Alfredo Maccarini, Rubén Argentino Villeres, Graciela Follini, Amelia Gutiérrez y Juan Carlos Ledesma, además de 21 casos de privación ilegítima de la libertad y tormentos. Grosse era capitán del Ejército y oficial de Inteligencia de la Plana Mayor (S2) del Regimiento "Lanceros General Paz". Según relató un testigo, Grosse decía que cuando golpeaba "Dios le agradecía".

Ferreyra y Grosse fueron acusados de dos homicidios (Fernández y Maccarini), 21 secuestros y 14 tormentos. Ferreyra, alias "Pájaro", era sargento y según el alegato de la Fiscalía fue "uno de los responsables del centro clandestino de detención de Monte Peloni".

A diferencia de los otros tres acusados, a Leites -ocho años de prisión- no se le imputaba ningún homicidio, pero sí 20 casos de privaciones ilegítimas de la libertad y 15 de torturas.

Leites era teniente primero al momento de los hechos y en su carácter de Jefe del Escuadrón "A" del Regimiento "Lanceros General Paz" también "tuvo participación destacada en los hechos", e integró los grupos de interrogatorios en el centro clandestino, según la Fiscalía.

En esa causa también estaba imputado el coronel retirado Juan Carlos Castignani, quien murió en 2012.