El jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri, pidió postergar el debate sobre la reforma del Código Penal "pensando en votarla en un par de años" y "no utilizarla en un tiempo electoral", y señaló que los problemas "graves" se relacionan "con los códigos procesales" provinciales y el "abuso de la excarcelación" por parte de la Justicia.

"No utilicemos en un tiempo electoral demagógicamente el debate de un instrumento tan importante. Saquémoslo de esa discusión. La
Argentina ya está de vuelta en un proceso electoral, con un Gobierno que está llegando a su fin de ciclo y con otros que tienen la esperanza de poder proponer algo diferente", dijo Macri durante una conferencia de prensa en la sede de la Jefatura de Gobierno.

Macri habló rodeado por sus principales colaboradores y legisladores del PRO, entre quienes estuvo, a su lado, el diputado Federico Pinedo, que integró la comisión especial que elaboró el anteproyecto junto al juez de la Corte Suprema Raúl Zaffaroni, el exjuez León Arslanian y los exdiputados Ricardo Gil Lavedra (UCR) y María Elena Barbagelata (Partido Socialista).

"Para mí no hay proyecto todavía, porque no hemos logrado ponernos de acuerdo toda la sociedad", dijo el mandatario y señaló que espera que la presidenta (Cristina Kirchner) diga: Vamos a mandar al Congreso esto, vamos a debatirlo, pensando en votarlo en un par de años ", porque "no hay urgencia".

De esta manera, Macri cuestionó sin mencionarlo al líder del Frente Renovador, el diputado Sergio Massa, quien inició una campaña de recolección de firmas en contra del anteproyecto dereforma penal y señaló que "lo grave" no es el texto de ese borrador, sino "lo que está pasando con el actual código, con los códigos procesales, con el abuso de la excarcelación".

"Los delincuentes que sistemáticamente flagelan a la población vuelven a la calle en un proceso absurdo de cárceles con puertas giratorias", planteó Macri y reclamó "discutir cómo hacemos que funcione la Justicia hoy, que no debería estar permitiendo que los delincuentes salgan tan rápido de las cárceles".

"Los delincuentes que están por delinquir en este momento, acá o en algún lugar de la Argentina, no están leyendo el Código Penal
anterior o el nuevo", aseveró el líder del PRO, y sostuvo que "tiene que ser el código de todos los argentinos, no de un sector de la sociedad".

Con respecto a la participación de Pinedo en la elaboración del anteproyecto, Macri dijo que el PRO "es el único" espacio que ha planteado "disidencias profundas que imposibilitan que se vote ese código".

"Las disidencias más importantes tienen que ver con la no reincidencia, que es la central, que hoy lamentablemente tampoco se aplica en la Argentina", afirmó Macri.

Señaló que muchos protagonistas de la política "toman posiciones extremadamente blandas frente al delito y frente a la inseguridad o posiciones duras, de hay que meterles bala a los delincuentes " y sostuvo que "con los dos discursos ha empeorado sistemáticamente la seguridad de los argentinos, y en estos últimos diez años aún más".

"Dejo un signo de interrogación porque la Presidenta también creo que en su discurso manifestó que va a introducir algunas modificaciones a la propuesta definitiva que envíe. Creo que debería reabrirla", planteó Macri.

Antes de la conferencia del mandatario, la vicejefa de Gobierno porteño, María Eugenia Vidal, sostuvo que "este no es el momento para una reforma penal" y consideró "a título personal" que le parece "un disparate bajar las penas por delitos y eliminar el agravante de la reincidencia".

"Una reforma que debe ser para los próximos 50 años no puede quedar atada a un proceso electoral que se va a dar dentro de un año y medio y no puede ser usada como herramienta política", afirmó Vidal.

En declaraciones radiales, la dirigente del PRO sostuvo que "esta no puede ser la reforma del kirchnerismo, ni de (Mauricio) Macri, ni de (Sergio) Massa ni de (Daniel) Scioli; tiene que ser un código de todos".

Sostuvo además que "para resolver la crisis de inseguridad de la Argentina" se necesita "poner más recursos en la policía para que ganen bien y estén equipados, programas sociales más amplios para que el delito no sea una alternativa de quienes no estudian ni trabajan" y remarcó que "para todo eso no es necesario reformar ningún código".