Las reservas internacionales se ubicaron en u$s37.851 millones, el nivel más bajo en los últimos seis años, según informó oficialmente el Banco Central. De esta manera, las reservas registran un nivel similar al que tenían el 20 de abril de 2007.

La mayor parte de esta caída diaria de las reservas la motivó el oro, metal que constituye el 7% de los activos de la entidad y cuyo precio retrocedió 3,4% en los mercados internacionales. Esta variable explica algo menos de u$s100 millones en la pérdida de reservas.

En lo que va de junio, las reservas cayeron 700 millones de dólares y u$s9.672 millones de dólares desde que se implantó el cepo cambiario, a fines de octubre de 2011.

Las reservas de la entidad que preside Mercedes Marcó del Pont disminuyeron 12,6% en el año o u$s5.439 millones desde que comenzó 2013, cuando alcanzaban los 43.290 millones de dólares. Además, ya resignaron u$s14.803 millones o 28,1% desde el récord histórico de u$s52.654 millones el 26 de enero de 2011, hace dos años y cinco meses.

La autoridad monetaria lleva acumuladas compras en el mercado mayorista de unos u$s1.250 millones en lo que va del año, contra u$s6.800 millones del mismo período del año pasado, lo que muestra a las claras las dificultades del Gobierno para hacerse de divisas aún en un contexto de rígido cepo cambiario. Las compras acumuladas en junio apenas orillan los u$s400 millones, a falta de dos días hábiles para el cierre del mes.

El blanqueo de capitales empieza la semana próxima y se extenderá como mínimo hasta el 30 de septiembre, aunque puede ser prorrogado por la presidente Cristina de Kirchner. Sin embargo, es un gran interrogante a cuánto ascenderá y si realmente será significativo como para fortalecer el nivel de reservas.