La combinación de estos dos materiales (un tipo de vidrio y de arcilla) son capaces de reducir la infectividad viral más del 99% en apenas 10 minutos de contacto, según los resultados de esta investigación que acaba de publicar el CSIC.

Además, ambos materiales ya han probado su gran eficacia desinfectante con los virus del COVID-19, de la gripe, del herpes simple y con adenovirus y también sirven contra bacterias y hongos.