Conservacionistas y científicos coincidieron en que el futuro Tratado de Alta Mar o de los océanos, que se propone poner a resguardo el 30% de aguas internacionales, “beneficiará” a la Argentina “en sus capacidades potenciales para custodiar los recursos vivos” de las aguas que cubren su plataforma submarina y resultará “complementario” de iniciativas nacionales de protección.

 Luego de casi 20 años de negociaciones, se acordó el texto del futuro Tratado de Alta Mar de la ONU, que busca garantizar la conservación y el uso sostenible de la diversidad biológica marina en áreas fuera de la jurisdicción nacional.

 Para lograrlo, plantea llevar el actual 1,2% de áreas oceánicas protegidas al 30%, que los países destinen más dinero a la conservación de este recurso, así como democratizar tanto el acceso como el uso de los recursos genéticos marinos.

 Quien declaró ante la prensa luego de que se de a conocer la noticia del nuevo tratado de Alta Mar, fue el investigador principal del Conicet y biólogo marino Luis Capozzo, que consideró como “histórico” el acuerdo porque hoy “todos los recursos que se encuentran más allá de las aguas jurisdiccionales de cada país, no tienen manera de ser protegidas” de amenazas como la sobrepesca, el tráfico excesivo, la contaminación, la exploración y la explotación hidrocarburifera o minera.

 Además agregó: “Cuando hablamos de los océanos estamos acostumbrados a pensar en abundancia ilimitada, pero hay que pensarlos como grandes desiertos con importantes oasis donde se encuentra una biodiversidad que es fundamental no sólo porque nos provee alimento sino también recursos marinos genéticos potencialmente beneficiosos para toda la humanidad”.

 Argentina desde el año 2006 posee aún más de las 200 millas náuticas entendida como Zona Económica Exclusiva establecida por la ONU, “la plataforma continental de nuestro país se extendía hasta la milla náutica 200, pero hace unos años la ONU aceptó cambios en los límites de los países que tienen costa marítima y en el caso de Argentina, en 2006 nuestro límite exterior este se extendió hasta la milla náutica 350”, manifestó Capozzo.

 “Por eso el tratado beneficiará las capacidades potenciales que va a tener la Argentina para ser custodio de los recursos vivos de la columna de agua desde la milla náutica 200 hasta la 350”, argumento el biólogo e investigador del Conicet, Luis Capozzo.