La Torre de Pisa, uno de los monumentos más famosos de Italia, reabrirá sus puertas luego de un proceso de restauración para tratar de reducir el ángulo de inclinación y de consolidación, que constituyen todo un símbolo de identidad de esta torre, que empezó a construirse en 1163 en la ciudad de Toscana.

Mediante esta última fase en el proceso de restauración, que comenzó en el año 2002, se pretenden mitigar los efectos que las 14.700 toneladas de peso y los 55,8 metros de altura ejercen sobre la inclinación de casi 4 metros que sufre la famosa torre, informaron diversos portales italianos.

Los trabajos se hicieron durante la noche ya que el edificio permaneció abierto a los centenares de miles de turistas que lo visitan cada año y que con el precio de la entrada contribuyeron a financiar en parte los trabajos