En la provincia de Buenos Aires, exigen a los restaurantes a informar a los comensales que tienen “sal light” a su disposición. Además, deben retirar los saleros de las mesas.

Por Continental, el director de Medicina Preventiva bonaerense, Luis Crovetto, explicó que “el objetivo es promover el hábito de usar una sal con menos contenido de sodio que reduzca las consecuencias negativas sobre la salud”.

Desde este lunes, los restaurantes deberán incluir en sus cartas de menú una leyenda advirtiendo los daños que puede causar a la salud el exceso de sal, y poner a disposición de los clientes sal dietética con bajo contenido de sodio (o también conocidas como sal light ), señaló en Magdalena Tempranísimo.

Los incumplimientos recibirán multas que irán desde 300 a 5.000 pesos, previa advertencia de la autoridad de aplicación y, en caso de reincidencia, hasta 180 días de inhabilitación.

Con esa y otras acciones, la Argentina busca alcanzar en 2020 la meta de bajar el actual consumo promedio diario de sal por persona de 12 a 5 gramos, con lo que se evitarán anualmente 6.000 muertes, 60.000 enfermedades cardíacas y ACV y un número similar de discapacidades en adultos jóvenes, estiman los especialistas.