Dos empleados municipales y un tercer hombre, que fue municipal, fueron demorados este martes en el marco de las investigaciones por envenenamiento masivo de animales en Deán Funes.

Los sospechosos estuvieron demorados en sede policial después de tres allanamientos en esa ciudad del norte cordobés, donde se acumulan unos 400 animales envenenados entre fin del año pasado y los últimos días. "Están libres. Nunca estuvieron detenidos. Se les tomó testimonio y seguimos con las investigaciones. Estamos buscando pruebas", indicó la policía.

El fiscal Gómez había señalado que por el momento sólo había "sospechas" y que por eso se habían dispuesto allanamientos. Durante los procedimientos en las viviendas de los demorados, la Policía encontró "elementos" de prueba que se convertirían en "pistas firmes para esclarecer lo sucedido", dijo a este diario el jefe policial Villalba.

“En un allanamiento secuestramos un vehículo relacionado con el que al parecer tiraba los cebos y en otro se secuestraron elementos que sirven a la causa como algunos insecticidas (Kaotrina) y tres pájaros enjaulados”, indicó Villalba. El comisario señaló que el material secuestrado “es producto de evaluación”.

En tanto, la Comuna de Deán Funes y los bomberos locales se dedicaron en las últimas horas a limpiar 25 colegios "para evitar intoxicaciones humanas. Se limpiaron los techos, los tanques de agua y los patios", consignó por Continental Raúl Figueroa, a cargo de la Intendencia. "No hay antecedentes en el país de una matanza de esta magnitud", graficó.

"Hasta el momento no se registró ninguna intoxicación humana con la sustancia utilizada, llamada metamil y perteneciente al grupo de los carbamatos", señaló el presidente del Concejo Deliberante, a cargo del Ejecutivo municipa en reemplazo de Alejandro Teijeiro, en viaje de estudios en Israel. "Hemos tenido nuevas denuncias, todavía hay cebos distribuidos, creemos que esto se ha tirado entre el sábado y el domingo", dijo Figueroa en Magdalena Tempranísimo.

Ahora resta definir qué se hará con los perros, gallinas, pájaros y hasta gatos muertos. "Tenemos un depósito final de los animales muertos, tenemos que definir si los cremamos o los depositamos en fosas totalmente aisladas, con cal y otros elementos, separados de la población urbana", añadió.

Entre el año pasado y estos días han muerto unos 400 perros en esta ciudad del norte cordobés de 21 mil habitantes, distante a 120 kilómetros de Córdoba. El martes se encontraron más animales muertos.