La madre de Michael Jackson demandó a la promotora de conciertos AEG Live por no haber suministrado ayuda médica adecuada al cantante pop y por haber sido negligente al contratar como su médico a Conrad Murray.

Jackson murió en junio de 2009 a los 50 años de una sobredosis de fármacos, en vísperas de iniciar una gira organizada por AEG Live, una de los principales promotoras de conciertos del mundo. 

Katherine Jackson presentó la demanda en representación de sí misma y sus tres hijos.

La demanda asegura que el contrato de AEG con el cantante "implicaba el deber legal de AEG de actuar razonablemente por el bienestar físico de Michael Jackson".