Luis Alberto Spinetta nació en Buenos Aires el 23 de enero de 1950.
Su familia vivía en el barrio de Núñez, en la calle Arribeños 2853, entre Congreso y Quesada, en el primer departamento de una construcción en propiedad horizontal, con ventana a la calle.
De su infancia y su barrio cercano a la cancha de River Plate, sacó la simpatía por el club de la banda roja.

Su padre, Luis Santiago Spinetta, era un cantante de tangos aficionado, que llegó a formar un grupo acompañado con guitarristas, y a cantar en algunas radios. Con esta influencia, Luis Alberto comenzó a cantar tangos desde muy niño, y ya desde los 4 años, su familia lo impulsaba a cantar en las reuniones.
En cualquier fiesta o evento, el pequeño Luis se quedaba parado cerca de cualquier escenario y cuando veía la chance se subía a cantar.

A mediados de los 60, en su barrio había dos bandas de rock: los Sbirros, con Emilio Del Guercio y Edelmiro Molinari. Y Los Larkings, con Rodolfo García. Y en el medio, el jovencito Spinetta.
Cuando terminaron el secundario, se fusionaron y allí nació Almendra.

Luis se asomaba a toda manifestación musical. El club del Clan no le gustaba, salvo por la chance de ver allí guitarras eléctricas en manos de músicos argentinos. Era algo novedoso.
Luego de muchos ensayos y esperando que Rodolfo García volviese del servicio militar, estuvieron listos para presentarse en sociedad. 
El mundillo rockero les prestó atención luego de escucharlos un domingo a la mañana en el Teatro Coliseo.
Por esa época, Luis escribió “Tema de Pototo” inspirado en un amigo suyo que vivía en Mar del Plata. Leonardo Favio, que grababa en la misma discográfica, se apoderó del tema y lo editó. Con los derechos de autor que cobró Spinetta por la venta se compró una guitarra eléctrica.
Almendra lo lanzó el 20 de septiembre de 1968 y en la radio sonaría por primera vez en “Modart en la noche”.
Fue el primer simple lanzado por el grupo.

Almendra editó dos discos: uno en 1969 y uno en 1970. Allí había temas que se harían himnos: Muchacha ojos de papel, Ana no duerme, Plegaria para un niño dormido, Laura va.

Luis Alberto Spinetta, la música hecha poesía

Almendra se despidió con dos conciertos en el cine Pueyrredón de Flores.
La empresa discográfica RCA le hizo una mala jugada a Luis. Cuando Almendra se separó, aún tenía los derechos de otro disco. Lo hizo Spinetta para cumplir el contrato, se llamaba “Spinettalandia y sus amigos”. Pero la compañía le cambió el nombre, le puso “Almendra” y colocó fotos del cuarteto en la tapa. El primer disco solista de Luis se llamó Almendra. Increíble.

El Flaco grabó con Billy Bond y la pesada del rock and roll y en marzo del 71 emprendió un viaje de siete meses por Brasil, Estados Unidos y Europa.
Cuándo regresó lanzó la pregunta: ¿Puede un pez contagiarse de hidrofobia? 
Era la movida inicial de Pescado Rabioso, una de las grandes bandas de la historia.
La primera formación se completó con Black Amaya en batería y Osvaldo Frascino en bajo. 
Era un trío inspirado en Pappo’s Blues, pero diferente.
En 1972 presentaron el disco “Desatormentándonos” y un año después con la incorporación de Carlos Cutaia y David Lebón hicieron “Pescado 2”.
¿Temas famosos? Blues de Cris, El Monstruo de la laguna, Me gusta ese tajo, Despiértate nena, Credulidad…

Pescado Rabioso era un grupo fumador. 
Ensayaban en el fondo de la casa de los Spinetta. El padre de Luis criaba canarios y guardaba los pájaros en la sala. Un día entró y dijo: “vengo a llevarme a los canarios porque con eso que fuman ustedes, los pájaros cantan cualquier cosa”

El último show de Pescado fue en Unidos de Pompeya. La mala onda entre ellos era notable y notoria. Luego, David escribiría en “Tema para Luis”: “la soledad es un amigo que no está. Me lo hiciste sentir”.

La distancia es un caudal de eternidad agazapado sobre la espalda de un león.

Aunque llevaba la firma de Pescado Rabioso, Artaud fue un esfuerzo solista, elegido en algunas oportunidades como el mejor disco de la historia del rock argentino. Fue craneado por un Spinetta inspirado, en estado de gracia. Allí vuelan temas como Bajan y Cantatas de puentes amarillos.

El debut de Invisible se produjo el 23 de noviembre del 73, en el Astral.

Luis Alberto Spinetta, la música hecha poesía

Junto a Luis, dos ex Pappo: Machi Rufino y Pomo Lorenzo.
Spinetta y Pappo eran amigos, pero en algún momento Luis necesitó alejarse de la intensidad del Carpo.
El disco Durazno Sangrando apareció el 16 de septiembre de 1975. Fue un éxito inmediato.
Invisible ya había mostrado algo de lo que se venía en el programa “Rock en Teleonce” pocas semanas atrás.
Lo presentaron con cuatro conciertos en el Teatro Coliseo. En uno de ellos, estuvo en la platea Astor Piazzolla, quien luego del recital llamó por teléfono a Spinetta y lo invitó a hacer un disco “Spinetta con Piazzolla”. Luis quedó paralizado de la emoción y le respondió que no, porque no estaba a la altura de semejante artista.
“Hubiera sido fabuloso, dijo Astor. Pero se asustó”.

Una de las canciones icónicas de ese tiempo fue “El anillo del capitán Beto”, que según Luis se basó en el viaje de un astronauta argentino del barrio de Haedo. Nada tenía que ver con el futbolista Norberto Beto Alonso, aunque en una parte la letra habla de un banderín de River Plate.  
El nombre de Beto, fue una sugerencia de Machi. Era un amigo suyo de la infancia que un día se tiró a una pileta, pegó en el borde y se murió.

Ese tema formó parte del último disco de Invisible que se llamó “El jardín de los presentes”, que tenía otra canción notable llamada Los libros de la buena memoria.

Invisible se separó formalmente el 10 de diciembre del 76 con un recital en el Luna Park. El día anterior había nacido Dante.
Spinetta se había casado con Patricia Zalazar el 16 de septiembre.

El 9 de septiembre de 1978, en el peor año del rock nacional, se hizo el primer concierto en el estadio Obras. Algunas versiones dicen que los primeros en tocar allí fueron los Serú Girán, pero lo cierto es que el primero fue Spinetta. En ese concierto presentó “tu destino es morir de amor”, con letra de Guillermo Vilas.

A través de su amigo Vilas, firmó con Columbia Internacional planeando entrar en el mercado yanqui. El resultado fue el fallido “Only love can Sustain”, grabado con cesionistas de Los Ángeles, pero que nunca vio la luz aquí.

El 7 de diciembre del 79 Almendra volvió para hacer dos conciertos en Obras y dos en el Lawn Tennis. Allí se grabó un disco doble en vivo y en el 80 sacaron un disco más de estudio: El valle interior.

Ya eran tiempos de Spinetta Jade, que debutó en Obras, el 3 de mayo del 80.
“Jade es un producto donde prima una búsqueda musical estricta”, dijo Luis.
Por esa formación pasaron Pomo Lorenzo, Leo Siujatovich, Mono Fontana, Lito Vitale, Beto Satragni y Pedro Aznar, entre otros.
Grabó cuatro discos: Alma de diamante, Los niños que escriben en el cielo, Bajo Belgrano y Madre en años luz, que se publicó en diciembre del 84. Es el disco más complejo de Jade, el primer álbum digital de la Argentina.

De esta etapa son canciones como Maribel se durmió (dedicada a las Madres de Plaza de Mayo), Canción del Bajo Belgrano, Alma de diamante, Mapa de tu amor, La herida de París.

CHARLY GARCIA
Muy pocas veces tocaron juntos Spinetta y Charly. Una de ellas fue en un programa de Canal 7 llamado “Cable a Tierra”, conducido por Pepe Eliaschev.

Las últimas dos son momentos históricos. Tuvieron que pasar montones de años, que Charly cayese en un pozo profundo, que pasara su recuperación junto a la familia de Palito Ortega, y que decidiese volver en un concierto que terminó siendo mítico. Luego de ocurrido, se lo conoció como el recital subactuático. Jamás cayó tanta lluvia mezclada con tanto viento. Hilda Lisarazu bailaba enloquecida en el escenario y decenas de miles en el estadio de Vélez. Y entró el Flaco, para hacer "Rezo por Vos", juntos. Fue el momento culminante del recital. Se repitió poco después, en lo que terminó siendo el último concierto de Spinetta: "Bandas Eternas", otro momento épico de la historia de Rock Nacional.

Mucho antes de estas dos ocasiones, iban a hacer un disco juntos, del que solo llegaron a grabar “Rezo por vos”. Pero en medio de la grabación sucedió algo que cambió la historia: le avisaron a Charly que se le había incendiado la casa. “Es mi culpa, demasiada energía junta” dijo Spinetta, Charly le tiró un cenicero y se acabó el disco en conjunto.

En el 83, Luis presentó como solista su álbum “Mondo di Cromo”, que tiene grandes composiciones como Yo quiero ver un tren, Será que la canción llegó hasta el sol.
Y en el 86, Privé, que incluyó Rezo por vos.
“Privado, carente de destinación deletérea. Nuclear, íntimo”, lo definió su creador.

Ese mismo año se realizó una fusión fantástica: Spinetta-Páez.
Grabaron el disco doble “La la la”. La química fue perfecta.

Allí están Folis Vergher y una versión del tango Gricel.

En noviembre del 88, con tres gloriosos recitales en el Teatro Broadway, Spinetta presentó “Tester de Violencia”.
Dijo: “Hasta que no terminé el disco era como una especie de enfermo, que no culminaba ni en la muerte ni en la salud”.
Allí está “La Bengala perdida”.

En el 89 fue soporte de Rod Stewart en los shows de Mar del Plata y River.
En el 91 presentó “Pelusón of Milk” que tiene la delciciosa “Seguir viviendo sin tu amor”.
En noviembre de ese año, casi se muere. Recibió dos descargas eléctricas en un show en la Plaza Moreno de La Plata.
“Se quedó pegado, cayó desmayado y pensamos que se moría”, dijo Giacobino, el iluminador.

CAROLINA Y EL DESIERTO 

En 1995 aparecieron “Los socios del desierto”. Con el Tuerto Wirtz en batería y Marcelo Torres en bajo agotaron cuatro funciones en el Astros y salieron de gira por el país.
Una noche, dieron un concierto en Bariloche. Desde San Martín de Los Andes viajó Carolina Pelleriti con una amiga para verlos. Al final del recital ella lo fue a saludar a Luis y él no tuvo más ojos para nadie. Fue un impacto a primera vista. 
Curiosamente, allí también estaba la mujer de Spinetta, Patricia, que lo vio todo y armó un lío bárbaro.

Un tiempo después, una tapa de la revista Gente confirmaba el romance. Con esa tapa Patricia Zalazar se enteró de cómo venía la mano. Luis se fue de la casa.
Y se rompió el cristal.

Aunque fue una gran relación, no duraría para siempre.
“Soy muy jodido para la felicidad”.

Era jodido también para algo que lo marcó constantemente en los recitales. La gente le pedía “cantá Muchacha” y él se negaba rotundamente. Había que pasar la página de una vez.
Podría decirse que Muchacha ojos de papel era su propia criptonita.
Lo cierto es que Luis Alberto Spinetta y Carolina Pelleritti se fueron a vivir juntos a un chalecito de la zona norte. Una noche volvían a casa en una camioneta y los asaltaron. Luego de sacarles todo lo de valor que tenían, el chorro le puso el revólver en la cara a Luis y le dijo: ¡Cantá Muchacha!
Y se terminó también ese amor, por varias razones: diferencia de edad, de visión y celos.

El 4 de marzo de 2005, Luis tocó en la Casa Rosada. Lo recibió el presidente Néstor Kirchner y el jefe de gabinete, Alberto Fernández.
Kirchner lo invitó a sentarse en el sillón de Rivadavia. Spinetta se negó. Néstor le dijo por lo bajo: “dale, se sentó cada garca acá”.

El 4 de diciembre de 2009 la historia del rock argentino hizo un click. 
Luis Alberto Spinetta dio uno de los shows más emblemáticos de todos los tiempos. Durante casi 6 horas (empezó 21.40 y terminó 3.30) entregó el alma en un recital que se llamó “Spinetta y las bandas eternas”.
Recopiló gran parte de su inmensa obra, repasando sus clásicos con Pescado Rabioso, Invisible y Almendra, además de sus hits solistas con invitados de lujo que se sumaron a la fiesta: Charly García, Fito Páez y Gustavo Cerati, entre muchos otros.
Fue en el estadio de Vélez ante 40.000 personas.

Fue una despedida a todo lujo.
Se venían varios finales seguidos. Primero el accidente cardiovascular de su admirado Gustavo Cerati. 
“Dios guardián cristalino de guitarras, que ahora, más tristes, penden y esperan de tus manos la palabra”, le escribió.
Lo fue a ver a la clínica y comentó: “No soy el mismo después de ver a ese gigante dormido”.

Y pronto llegaría su propio desenlace. 
A mediados de 2011 le detectaron cáncer de pulmón.
A fines de ese año, en la cuenta de twitter de su hijo Dante, el Flaco escribió "Desde el mes de julio sé que tengo cáncer de pulmón. Estoy muy cuidado por una familia amorosa, por los amigos del alma, y por los mejores médicos que tenemos en el país. Ante el aluvión de información inexacta, quiero aclarar públicamente las condiciones de mi estado de salud. Me encuentro muy bien, en pleno tratamiento hacia una curación definitiva".

Murió el 8 de febrero de 2012 a las 4 y 20 de la tarde.
Le puso humor a su muerte. Pocos días antes le mandó un mensaje a Rodolfo García: “Estaría necesitando unas clases de arpa”.

Estés donde estés, un último pedido.
Dale Flaco, cantá Muchacha.