La batalla mediática y judical entre Luciana Salazar y Martín Redrado, no se detiene y ahora, la modelo consiguió que un juzgado de familia decrete un embargo sobre una de las cuentas del economista, por una aparente deuda de alimentos para la hija de Luciana, Matilda.

Según trascendió, el economista debería 10 meses de alimentos convenidos y por eso la Justicia decidió hacérselos pagar, mediante dicho embargo.

Lo curioso es que la ex pareja ha sostenido siempre, que Matilda es solamente hija de Luciana y no se Redrado, por lo cual resulta curioso que se lo condene a pagar alimentos, a menos que exista un convenio firmado entre ellos y eso sea lo que se está ejecutando.