Se estima que los perros de la Capital Federal dejan en sus calles cada día setenta mil kilos de excremento. Se calcula que hay un millón de mascotas en los hogares porteños, confesó Horacio Rodríguez Larreta, jefe de Gabinete de la Ciudad.
 
Un estudio similar del Ministerio de Ambiente Público del Gobierno porteño realizado en 2011 calculaba la cantidad de excremento generado por los medios en treinta y cinco toneladas, pero un informe de ese mismo año realizado por el Instituto de Zoonosis Luis Pasteur precisó el cálculo en la doble cantidad, teniendo en cuenta la cantidad de animales, su tamaño y su actividad. Sin embargo, aclaró Rodríguez Larreta, se está actualizando la cifra, y se descuenta que la cantidad sea mayor, porque “hoy los perros son más grandes y producen más materia fecal”.

Uno de los lugares más afectados son las plazas y en muchas de ellas los lugares destinados a los niños están invadidos por los paseadores de perros. Además, representan un problema grave para la salud. Un perro mediano genera unos 18 kilos de excremento al mes, que se transforman en polvo y se incorporan al aire que respiramos. Los gérmenes provenientes de las heces se desechan al aire libre y se introducen en el organismo del ser humano por medio de la respiración o al ingerir alimentos preparados en la calle. Esto ocasiona infecciones por parásitos lombrices, amebas o bacterias, y enfermedades del aparato digestivo, la visión, el corazón, el hígado y la piel, explican los especialistas.
 
Rodríguez Larreta informó que se están buscando soluciones como el “Programa Mascotas” que prevé la entrega de más de diez millones de bolsas negras que se pueden retirar gratis de unas doscientas cajas expendedoras ubicadas en espacios verdes, veterinarias y edificios de las Comunas 2, 6, 13 y 14. Y desde la Secretaría de Atención Ciudadana ya están coordinando las obras de cuatro caniles más, destacó, aunque enfatizó que el mayor problema es el cultural.