Los científicos han determinado que se pueden mantener relaciones sexuales mientras dormimos y no acordarnos de nada al día siguiente. Quizá para algunos les suene a ciencia ficción, pero esto existe y se llama sexsomnia.

Es uno de los tantos trastornos del sueño como podrían ser el insomnio, el sonambulismo, la somniloquia (hablar en sueños), la somnolencia diurna o, en este caso, dentro de las conductas que interrumpen el sueño.