Los jugadores de la selección norteamericana de fútbol femenino recibirán 24 millones de dólares en salarios, y la federación de ese país, US Soccer, ha prometido la igualdad de remuneración para los equipos masculino y femenino en todas las competiciones, incluida la Copa del Mundo. Los 28 miembros del equipo habían presentado una demanda por discriminación en marzo de 2019.