La suba en altos porcentajes del precio de la papa, cientos de productores de ese cultivo y también en varios restaurantes decidieron no venderla.

“Llovió mucho en agosto y eso hizo que no se pudiera cosechar papa en los últimos 25 días y no entra en el mercado”, remarcó el productor de la zona de Balcarce, Guillermo Cerono.

“Algo de pérdida habrá pero no tanto como se dice”, dijo, al aclarar que lo que afecta la cosecha es la intensa lluvia.

“Una de las soluciones sería no comprar papas” por el momento, advirtió.

“La papa de nuestra zona es la negra”, remarcó Cerono, al tiempo que indicó: “la que más se consume es la variedad ‘espunta’, que no es la mejor calidad pero sí la de mejor aspecto”.

“Los argentinos no sabemos comer papas, en otros países tienen otros tratamientos y más variedad”, subrayó.