La Legislatura aprobó una ley que crea una nueva área de protección histórica en la “city” porteña y amplía el casco histórico.

Se trata de la zona de unas cincuenta manzanas delimitada por la calle Florida, la Recova del Bajo, la Plaza San Martín y la Avenida de Mayo. En ese área, además, se recatalogaron unos doscientos edificios que estaban sin protección patrimonial.

Por Continental, Patricio Di Stefano, diputado del PRO y presidente de la comisión de Patrimonio Arquitectónico remarcó que la iniciativa “crea la mayor área de protección histórica de los últimos treinta años”, décadas en las que el abandono de los edificios tradicionales de la ciudad adquirió ribetes simbólicos de lo que ocurría con el país.

En Magdalena Tempranísimo, Di Stefano resaltó que la nueva norma “pone límites estrictos para las nuevas construcciones”.