Cancelaron la nueva película de James Bond por falta de fondos.

El filme tenía un costo previsto de 200 millones de dólares. Iba a ser protagonizada por el británico Daniel Craig como agente 007 y estaba previsto que la estrenaran en 2012.

Sin embargo, las deudas por 3.650 millones de dólares del estudio Metro-Goldwyn-Mayer, que co-financió la película, determinaron la decisión de no filmarla.

Retomar el proyecto podría llevar años, tras esta medida.

"Los miembros del equipo de producción fueron informados que la película de Bond fue archivada. Hay una atmósfera muy mala entre los trabajadores, ya que falta dinero y se puso mucho trabajo en el filme", declaró un vocero de la productora.

El director británico Sam Mendes, creador de películas como "Belleza Americana", había sido contratado para dirigir la película 23 de la saga de James Bond, que comenzó con "El Satánico Dr. No" (Sean Connery y Ursula Andress) en 1962.

La compañía de producción EON confirmó en un comunicado que el rodaje del filme "quedó paralizado por falta de fondos".