El gobernador de California, Gavin Newsom, firmó el jueves un proyecto de ley que convierte al estado en el primero en prohibir el "stealthing", es decir, quitarse el preservativo, el condón, durante una relación sexual sin el consentimiento verbal de la pareja.

La nueva ley convierte la retirada de un preservativo sin consentimiento en una agresión sexual, y afirma que esta práctica "causa daños físicos y emocionales a largo plazo a sus víctimas", según la asambleísta estatal Cristina García, demócrata y autora del proyecto de ley.

García, que ha abogado por la ley desde hace mucho tiempo, dijo que los informes sobre el “stealthing” estaban aumentando entre las mujeres y los hombres homosexuales. García afirma que espera que otros estados adopten una legislación similar que deje claro que "el stealthing no solo es inmoral sino ilegal".

García también es autora del proyecto de ley AB 1171, que Newsom también firmó, para eliminar la "excepción de violación conyugal" y "garantizar que la violación conyugal sea tratada y castigada con la misma seriedad que la violación de un no cónyuge", según la asambleísta.

"La violación es violación", dijo García. "Y una licencia de matrimonio no es una excusa para cometer uno de los crímenes más violentos y sádicos de la sociedad".