De acuerdo a una investigación de la Universidad de Miami, las personas tatuadas tienen más parejas sexuales en comparación a quienes no tienen tatuajes.

A primera vista se podría inferir que los tatuajes contribuyen a tener una vida sexual mejor, pero en realidad este estudio habla de cantidad, mas no de calidad. La correlación está en tener estos grabados sobre la piel con una vida sexual más activa y variada, no desde un punto negativo o positivo, solo como un dato.