“Estábamos muy emocionados, hace mucho que no nos veíamos; hablamos de muchas cosas”, relató Gustavo Vera, presidente de la ONG La Alameda, quien fue recibido en Roma por el Papa Francisco, con quien tiene un vínculo de muchos años.

“Lo vi muy bien, muy calmo, muy atento a lo que está ocurriendo en el mundo y también en la Argentina”, definió el dirigente social en Entre Líneas.

“Francisco siempre entendió al poder como un servicio al bien común y como un ‘poder’ hacer; tal vez antes estaba mucho más limitado en eso como cardenal. Él pasó una etapa de aislamiento muy fuerte en Buenos Aires. A pesar de ello siempre estuvo muy conectado con las villas y con los pobres. Aunque esté allá, sigue siendo muy fiel a sí mismo”, destacó Vera.

Además, recordó que “todos los integrantes de La Alameda –que han salido del trabajo insalubre, esclavo- no son creyentes pero siempre se sintieron impactados por su persona”.

Cuestión Argentina

“Francisco está preocupado por el avance del narcotráfico y también la trata, la corrupción, la falta de diálogo. Le llevé cartas de familiares de víctimas de Cromañón y la tragedia de Once…también varias denuncias de fiscales”, contó Vera.