El ministro de Economía, Martín Guzmán, se encuentra redactando el proyecto de ordenamiento presupuestario, que reemplazaría la Ley de Presupuesto que el Congreso rechazó. Y en ese decretó, pretende comenzar a aplicar el ajuste prometido al FMI dentro del acuerdo con ese organismo.

La idea de Guzmán es reducir los giros financieros a las provincias y especialmente, aquellos destinados a la obra pública, lo que está generando roces con los gobernadores, y con quien los representa en el gabinete, especialmente el jefe de dicho Gabinete, Juan Manzur, que se resiste al recorte.

Las mismas inquietudes le han manifestado los gobernadores que están de gira con el ministro del Interior, Eduardo "Wado" De Pedro, pero el funcionario kirchnerista no puede darles respuesta porque coincide con la postura de los mandatarios provinciales, pero Guzmán solo responde a Alberto Fernández.

Gildo Insfrán de Formosa, Raúl Jalil de Catamarca y Sergio Uñac de San Juan, son algunos de los gobernadores que no quieren saber nada con los recortes. Si esto progresa, Alberto puede terminar no solamente enfrentado con el kirchnerismo sino también con los gobernadores peronistas.