La vicepresidenta Cristina Kirchner asistió a la residencia presidencial de Olivos, invitada por el presidente Alberto Fernández para cenar, y a efectos de buscar una salida a la crisis institucional fruto de sus desaveniencias en materia de política económica y ejercicio de la investidura presidencial.

Cristina accedió a la reunión después de verios meses de no encontrarse a solas con el presidente, con la idea de tratar de acercar las posiciones, pero según fuentes cercanas a la vicepresidenta, el encuentro no alcanzó muchos frutos, sea en materia de políticas ni personal.

La designación de la nueva ministra de Economía, Silvina Batakis, fue un paso que debieron dar tras la intempestiva salida de Martín Guzmán, pero ya empezaron los tironeos sobre que medidas tomará la nueva responsable del Palacio de Hacienda.