Las víctimas, ella peluquera y él mecánico en la villa serrana que dista 35 kilómetros de la ciudad de Córdoba, creyeron que su nieta estaba secuestrada y de a poco fueron aportando datos que los delincuentes utilizaron para hacer más real el hecho, según explicó el comisario mayor de la Jefatura Departamental Punilla, Gustavo Quevedo.

El jefe policial confirmó que la pareja reunió unos 400.000 pesos, lo colocó en una bolsa de consorcio y lo dejó en la esquina de la casa, tal como le indicaron los delincuentes.

Instantes después, llegó un auto en el que había dos hombres, quienes rápidamente se apoderaron del dinero y huyeron.

Fuentes policiales dijeron que la suma de dinero pagada como rescate la pareja la guardaba en la casa porque se la habían enviado sus hijos desde Buenos Aires para la compra de una propiedad.