En el marco del juicio oral y público por el encubrimiento del asesinato de María Marta García Belsunce, Oscar Sierco, ex gerente de la funeraria Casa Sierra, contratada para la inhumación de la socióloga, declaró que la familia de la víctima compró el cajón más barato porque “la iban a cremar”.

Sierco aseveró que “odia” a la familia, que piensa que es la “culpable” del crimen y que son “lo peor”.

“Cuando vi por la televisión que María Marta había sido asesinada, si tenía un arma me pegaba un tiro, no podía creer en lo que me metieron”, graficó el testigo.