Investigan el asesinato de una mujer que apareció en la cámara séptica del baño de una fábrica de cerámicas, El Palomar.

El supuesto asesino fue detenido en la provincia de Entre Ríos, donde habría llegado con el objetivo de continuar escapando hacia Paraguay, y era compañero de trabajo de la víctima.

Marisa Sotelo habría sido asesinada a golpes por un compañero. Tenía veinticinco años y trabajaba como secretaria en esa planta fabril.

Un hombre, presunto compañero de trabajo de la mujer, fue detenido en Entre Ríos, aparentemente, cuando intentaba abordar un ómnibus para viajar a Paraguay.

Por Continental, vecinos del sitio explicaron que “durante la noche escucharon gritos de auxilio de una mujer y luego algunos golpes contra el portón de entrada de la fábrica”, por lo que dieron “aviso a la policía”.