Detuvieron al encargado de un edificio del barrio porteño de Flores que estaba prófugo tras una condena por asesinar a una joven. Alfredo Daniel Buassi fue hallado por efectivos de la División Homicidios de la Policía Federal escondido debajo de una cama de su departamento del 10 “F” del edificio de Bacacay 3862, en el barrio de Floresta. Había regresado a buscar ropa a su vivienda.

Había recibido una condena a trece años de prisión por el asesinato de una mujer que residía en el inmueble y cuyo cadáver nunca fue hallado desde 2007. Buassi tenía una orden de captura de mayo último, cuando la sala IV de la Cámara de Casación Penal de esta Capital Federal le atribuyó el “homicidio simple” de Máxima Ramona Escobar Martínez (19), de nacionalidad paraguaya.

Había sido absuelto en 2009 en un juicio oral porque, a criterio de los jueces, no había sido probada la muerte de la joven. Sin embargo, la Cámara de Casación revocó esa absolución, ordenó que se lo condenase a 13 años de cárcel y emitió la orden de captura.

El hecho comenzó a investigarse el 24 de noviembre de 2007, cuando en la comisaría 43ra recibieron el llamado de la madre de Buassi que aseguró que su hijo había matado a una chica. La mujer precisó que, luego de matar a la joven, su hijo la descuartizó en la terraza del edificio de la calle Bacacay 3862 y colocó en cajas y bolsas las partes desmembradas del cadáver.