Una mujer circulaba por la autopista La Plata-Buenos Aires cuando fue víctima de un piedrazo que pudo haberle costado la vida, a la altura del kilómetro 51 de esa autovía.

"Yo venía de pasar un Día de la Madre muy lindo, con mis suegros, en Florencio Varela. Cuando estábamos por bajar de la autopista, en el kilómetro 51, más o menos, veo que viene un chico que se me abalanza con una piedra en la mano. Atiné a acelerar un poco más fuerte y me agaché sobre el volante. Grité «¡guarda!» para que tengan cuidado mis hijos, que venían conmigo", contó angustiada la mujer.

"Igual la piedra impactó, me cayeron todos los vidrios, me pegó en la cabeza y en la mano. La piedra rebotó y le pegó a mi hija de 12 años, que venía sentada atrás, en la rodilla. Ella cuando escuchó mi grito se cubrió la cara con las piernas", contó la mujer, llamada CarolaTN.

"Volaron vidrios por todos lados y yo, asustada y con la cabeza todavía media baja por miedo a que cayeran más piedrazos, empecé a buscar un patrullero. Recién encontré uno en la siguiente salida, donde nos derivaron a una comisaría. Indignada, en la comisaría pregunté por qué no iban a la zona donde tiraban piedras y me contestaron que ellos no van, porque a ellos todo el tiempo les tiran piedras y que ese día les habían disparado dos veces", relató la mujer.