La madre de Naira Cofreces, la chica de 17 que falleció tras ser atacada a golpes por sus compañeras, dijo entre lágrimas que su hija nunca había tenido problemas y que en cambio era "alegre, divertida". "Me la arrancaron", se lamentó. "Me arrancaron la vida...Justicia, por favor, para que no pase todos los días", expresó.

Según indicó, Naira nunca había sido agredida antes: "Era una chica que no tenía maldad, tenía toda la vida por delante", dijo entre llantos, y no supo precisar los motivos detrás del ataque.

Junto a su hijo, hermano de la víctima, agregó que la brutal golpiza no había sido destinada a ella, sino a otra compañera que, adelantándose a la situación, sintió miedo y se retiró antes de la Escuela Secundaria Nocturna Nº5.

La otra chica a la cual habría estado dirigida la agresión formaba parte del grupo de amigas de Naira, señaló la madre de la joven y relató: "Ella llegó bien a casa y me contó: 'Mami, no era para mí'".