Víctor Hugo Bertone atesoraba un sueño desde 1982. Quería volver, un día, a las Islas Malvinas donde combatió como soldado conscripto en la guerra contra los británicos. Al sueño, 29 años después, lo acaba de cumplir gracias a la ayuda de Omar Pistelli, el dueño del taller en el que trabaja.

En realidad, para Pistelli, ir a Malvinas era también una deuda personal. En aquellos días de 1982, sin ser conscripto se anotó como voluntario para ir a Malvinas. Pero no pudo ser de la partida. Desde entonces, se propuso agradecer a su modo a todos los soldados que lucharon en las heladas islas.

En enero del año pasado, Bertone y Pistelli viajaron juntos a Malvinas. Nacido en Elena hace 48 años, Bertone trabajaba de camionero. Hace tres años, por azar, llegó un día al pequeño negocio del mecánico Pistelli, en Río Tercero. Hablaron ese día, y algunos más, sobre esa identificación en común con Malvinas. Al poco tiempo, Bertone recibió la propuesta de Pistelli para ser su empleado, en un local en Almafuerte.

Bertone dice que, en su caso, haber sido ex combatiente le abrió la puerta a ese empleo. Pero apuntó que no es lo habitual: “A muchos les resulta un escollo conseguir trabajo cuando muestran el certificado de veterano de guerra”


Pistelli relató que apenas terminada la guerra, se propuso agradecer a todos los soldados que participaron. “Van 800 y algo; me quedan unos 12 mil”, arriesgó, convencido que tendrá toda la vida para cumplir su objetivo. Con una muy particular visión, aseguró “sentir culpa” por no haber podido colaborar más directamente en aquel conflicto bélico. “Pagaré mi deuda con Malvinas cuando salude, le dé la mano y le agradezca hasta al último veterano”, dice que se juró.


En las islas, recorrió las trincheras que hace casi tres décadas ocupó. Le mostró a Pistelli cada sitio de combate donde estuvo, y lugares como Pradera del Ganso, Puerto Argentino, Puerto Darwin y otros. Victor Hugo recuerda con orgullo que perteneció “al Regimiento de Infantería 25, a cargo de Mohamed Seineldín, en el que estaba el teniente Roberto Estévez, un héroe que murió combatiendo y soportó tres heridas de bala”.