El salto del austríaco Felix Baumgartner que buscaba romper la barrera del sonido se suspendió por problemas climáticos y una falla en el globo que lo elevarla.

Baumgartner intentaba convertirse este martes en el primer humano en romper la barrera del sonido en una caída libre desde 36.576 metros.

"El miedo más grande lo tendré seguro cuando intente dormir un poco, cuando todo esté tranquilo a mi alrededor y esté solo con mis pensamientos, unas cuantas horas antes del comienzo de los preparativos", había reconocido Baumgartner en relación a los momentos finales antes de intentar su récord.

En verdad, varios récords: ser el primero en superar la velocidad del sonido (más de 1.100 kilómetros por hora) sin ayuda mecánica, en realizar el salto con paracaídas desde más altura, protagonizar la caída libre más larga (unos 15 minutos) y subir en globo al punto más alejado de la tierra.

En julio pasado, Baumgartner dio un nuevo paso para convertirse en el primer hombre que rompa la barrera del sonido en caída libre, al lnzarse en paracaídas desde 29.457 metros sobre el desierto cercano a Roswell, Nuevo México, donde aterrizó sano y salvo dos minutos después. "Voló" a una velocidad máxima de 862 kilómetros por hora.