La agencia espacial de Estados Unidos (NASA) presentó este jueves en Washington evidencias de formas de vida que se desarrollaron en la Tierra pero en condiciones altamente tóxicas, reproduciéndose en un ambiente de arsénico.

El descubrimiento, realizado en "el duro medio ambiente del lago Mono", en California, "acaba de expandir la definición de vida", explicó Ed Weller, uno de los investigadores de la NASA

La NASA presentó los resultados de una investigación que demostraría que la vida como se la conoce en la Tierra es ahora un concepto más amplio y que podría repetirse en los ambientes tóxicos de otros planetas.

"Al tiempo que seguimos adelante con nuestros esfuerzos para buscar señales de vida en el Sistema Solar -añadió Weller-, ahora tenemos que pensar de manera más amplia, más diversa, y considerar la vida de maneras que no conocíamos".

Según la NASA, el hallazgo de composiciones bioquímicas alternativas "alterará los libros de texto de la biología y ampliará el alcance de la búsqueda de vida más allá de la Tierra".
"Nosotros sabíamos que algunos microbios pueden respirar arsénico, pero lo que encontramos es un microbio que hace algo nuevo: construir partes de sí mismo con arsénico", dijo Felisa Wolfe-Simon, una de las principales astrobiólogas de la NASA.

La bacteria, hallada por científicos estadounidenses en los sedimentos del lago Mono, puede metabolizar el arsénico -metaloide pesado tóxico- e incorporarlo en grasas, proteínas y hasta en su genoma, en lugar del fósforo. Por primera vez un componente central de todos los seres vivos puede ser reemplazado por otro elemento.