La justicia rusa confirmó hoy la acusación del cargo de piratería contra la activista argentina de Greenpeace Camila Speziale, que participó de la protesta contra la extracción de petróleo en el Artico. El cargo, por el que la ley rusa prevé hasta 15 años de prisión, incluye a cuatro activistas más y se podría extender a los otros 25, entre los que está Hernán Orsi, el otro argentino detenido.

La organización ecologista consideró además en un comunicado que estos cargos "son extremos y desproporcionados" y que "suponen un ataque contra el derecho de protesta pacífica" ya que "no tienen ningún sustento según la legalidad rusa e internacional".

Los hechos por los cuales fueron detenidos los ambientalistas ocurrieron el 19 de septiembre, cuando intentaron escalar la plataforma petrolera ubicada en el Artico para alertar sobre el peligro que la actividad implica en esa zona, rodeada de tres reservas naturales.

Al persistir en el intento, la Guardia Costera los detuvo, remolcó el buque hasta la bahía de Murmansk y los activistas quedaron a disposición de la justicia, que fue disponiendo dos meses de prisión preventiva a medida que declaraban, según dijeron, por "peligro de fuga".

En la jornada de hoy sólo se permitió la presencia de los abogados, dijo a dpa una portavoz de Greenpeace, que espera que continúen mañana jueves las acusaciones del resto de las 25 personas a bordo del barco, tras pasar varios días en prisión preventiva.