La Torre Argentina de Roma fue, según anunció el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), el lugar exacto en el que fue apuñalado Cayo Julio César en el año 44 antes de Cristo.

Varios textos romanos antiguos describen el asesinato de Julio César en la Curia de Pompeyo de Roma. Un hecho, fruto del complot de un grupo de senadores para eliminar al general del partido popular de la ciudad imperial, que desembocaría en la formación del segundo triunvirato y en el estallido final de las guerras civiles, luego de las cuales su hijo adoptivo, Octavio César Augusto, llevó adelante las ideas que el crimen político había truncado.  

Ahora, 2.056 años después, una estructura de hormigón de tres metros de ancho por más de dos de alto colocada por orden de Augusto, hijo adoptivo y sucesor de Julio César, para condenar el asesinato de su padre, dio la clave a los científicos.

Este hallazgo confirma que el general fue apuñalado justo en el centro del fondo de la Curia de Pompeyo, mientras presidía, sentado en una silla, la reunión del Senado.

"Siempre se supo que Julio César fue asesinado en la Curia de Pompeyo el 15 de marzo del 44 a.C., porque los textos clásicos así nos lo transmiten, pero hasta ahora no se había recuperado ningún testimonio material de este hecho", explicó en un comunicado el investigador Antonio Monterroso, que trabaja en Instituto de Historia del Centro de Ciencias Humanas y Sociales del CSIC.

Las fuentes clásicas aluden a la clausura, años después del asesinato, de la Curia, un lugar que pasaría a convertirse en una capilla. "Sabemos con seguridad que el lugar donde Julio César presidió aquella sesión del Senado y donde cayó apuñalado se clausuró con una estructura rectangular organizada conforme a cuatro muros que delimitan un relleno de hormigón. Lo que no sabemos es si esta clausura supuso también que el edificio dejara de ser completamente accesible".