“Me decían 'Vas a morir como un perro'. Es un milagro que haya podido traer a las nenas de vuelta. Nunca quise renunciar en esta lucha”. Quien lo dice es Denis Burns, el padre de las dos nenas que vivían en la Argentina con su mamá, Ana Alianelli, y ahora le fueron restituidas por la Justicia. El hombre además contó que las nenas quedaron traumadas después de lo que vivieron en el aeropuerto, y ahora teme que su ex mujer vuelva a llevarse a sus hijas.

Burns contó por primera vez su versión en el diario La Nación. Hasta el momento, sólo había hablado en público su ex mujer, contando su versión de la dramática historia familiar originada por la pelea de dos padres de distinta nacionalidad por la tenencia de sus hijas.

“Estoy todavía en estado de shock. Pasé tres semanas en la Argentina y apenas comía o dormía allá. Fue extremadamente difícil. Me gusta correr, y la verdad es que siempre miraba para atrás cuando corría porque ponían mis fotos en las noticias. Me decían 'vas a morir como un perro'. Es un milagro que haya podido traer a las nenas de vuelta. Nunca quise renunciar en esta lucha”, relató.

Cuando le preguntaron por sus hijas, Burns respondió: “Las chicas quedaron traumadas después de lo que ocurrió en el aeropuerto. Se asustaron cuando les pusieron los micrófonos en la cara. Ahora quiero que las chicas empiecen a vivir como chicos normales de su edad. Que tengan amigos, vayan a la escuela. Que compartan su tiempo con su papá y su mamá”.