“Hace una década nadie hablaba de neurociencia”, destacó Facundo Manes, quien visitó los estudios de Radio Continental.
 
“Argentina se desarrolló tarde en ciencia cognitiva”, enfatizó el neurólogo, quien aseguró que “no tiene sentido hacer un antagonismo con el psicoanálisis”.
 
“Si Freud viviera hoy sería científico, pero no tuvo tiempo de vida para hacerlo. Deberíamos tener más puntos en común” con estos profesionales, aseguró.
 
“Todo lo hacemos con el cerebro, estudiamos cómo impacta la neurociencia en diferentes actividades”, dijo Manes.
 
“Hoy podemos estudiar el cerebro ‘in vivo’. Pero, por suerte, la principal limitación que tiene la ciencia es que no puede saber qué es lo que un ser humano piensa”, enfatizó.
 
“Parte de mi rol es poner límites”, advirtió.
 
“Hay un rol importante de la genética en la depresión”, enfatizó Manes y agregó: “No tenemos mucha idea qué sucede en los cerebros de personas con trastornos afectivos. Pero hoy en la sociedad la esquizofrenia, el autismo, la depresión, el estrés, la ansiedad, el trastorno bipolar, causan más discapacidad que el cáncer y que el trastorno cardiovascular”, subrayó.
 
“La ciencia puede medir el coeficiencia intelectual pero no puede medir la inteligencia en su totalidad”, dijo.
 
Usar el Cerebro es el último libro que Manes escribió con Mateo Liro, un Licenciado en Letras. “Para mí, el futuro de la neurociencia va a colaborar con distintas disciplinas, va a tender puentes. Muchas veces, la ciencia no se permite la antigüedad”, señaló.
 
Hombre – Mujer
 
“Hay una tendencia científica a mostrar que la mujer procesa la emoción de distinta manera que el hombre; también es cierto que un grupo funciona mejor con una mujer adentro”, remarcó.
 
“Lo que recomendamos para mantener la mente en forma es hacer transpirar el cerebro, un desafío”, subrayó.
 
“Caminar es un muy buen antidepresivo y ansiolítico”, aseguró. “No sabemos cómo el cerebro genera la creatividad…el ‘Eureca’ surge cuando nos relajamos. Lo que no se sabe es cómo ser más creativos”, aseguró Manes.
 
“Para mí la política es una herramienta formidable de transformación social; yo no creo en los proyecto biográficos”, enfatizó. “Un país es su capital mental”, aseguró el neurólogo, sin confirmar si lanzará en breve su carrera en la esfera política.