Juan Carlos De Lorenzo, es Ingeniero Hidráulico y Civil, ex Consejero de la Universidad de La Plata. Por Continental, el experto detalló la necesidad de “aceptar la característica topográfica de la Provincia de Buenos Aires”

“Lo que falta en el distrito es un plan integral de proyectos de desagües pluviales; falta un programa ejecutivo, de tipo político, para cuidar las cuencas y tratar de alterarlas lo menos posible, así como rever las que fueron violentamente alteradas”, subrayó.
“Tratamos hace años de que la provincia tenga una red hidrométrica para poder prevenir estos fenómenos”, agregó De Lorenzo.

“No tiene que ver sólo con las lluvias sino con la capacidad de saturación del suelo. Buenos Aires no tiene red hidrométrica, lo que supone un atraso espectacular: son una serie de estaciones que miden variables hidrológicas y permiten determinar los caudales que pueden producirse, incluso, meses antes de que algo suceda”, sostuvo. Además, aseguró que con este sistema “se mejora la capacidad ejecutiva” ante estas adversidades.

“Las cuencas del Salado y la de Luján son dos cosas totalmente distintas”, remarcó el facultativo.

“La Argentina tampoco cuenta con una programación territorial; se concentra a la población y después eso se paga”, dijo.
Además, sostuvo que “la siembra directa nada tiene que ver con esto. Y si hubiere canales clandestinos haya autoridad de aplicación precisa para controlar este tipo de cosas”.

“No se hace nada” en materia de obras hidráulicas, remarcó De Lorenzo, y advirtió: “lo mismo ocurre con la red vial. No existe una planificación de Estado y cualquier situación emerge como un hecho gravísimo”.