Desde la mencionada dependencia oficial explicaron que estos eventos organizados en quintas del conurbano y La Plata suelen reunir a más de 1.000 jóvenes, muchos de ellos menores de edad a los que se les vende alcohol sin restricciones.

Las megafiestas suelen ser convocadas por Facebook, pero para evitar ser clausurados, los organizadores evitan dar la dirección del lugar hasta pocas horas antes del evento.

Desde la Subsecretaría de Adicciones del ministerio de Salud provincial advirtieron que detrás de estos eventos existe una gran organización, que crece y se complejiza a medida que aumentan los operativos.

Los organizadores buscan estrategias para convocar a los jóvenes y, al mismo tiempo, evitar ser descubiertos por las autoridades del Registro Provincial para la Comercialización de Bebidas Alcohólicas (REBA).

Las entradas a estos megaeventos cuestan entre $80 y $300, y vienen “con una consumición incluida, así, en caso de que sean clausurados, los organizadores se garantizan, aun sin entregarlo, el dinero de un trago por persona”, aseguró Juan Lauro, director del Reba.

Sin embargo, en lo que va del año, el REBA clausuró 18 fiestas, tres veces más que en 2012.

Además, en total, fueron secuestradas casi 13 mil botellas de bebidas alcohólicas.

Las causas más frecuente de clausuras por parte del ministerio de Salud son la ausencia de licencia que habilita la venta de alcohol, la concurrencia y el expendio de bebidas alcohólicas a menores, y la falta de inscripción en el RAN (Registro de Actividades Nocturnas).