El premio Nobel de Medicina fue otorgado por el Instituto Karolinska de Suecia al británico Robert Edwards, padre de la fecundación in vitro, quien en 1978 logró el nacimiento del primer bebé de probeta.

Edwards es pionero de una técnica que tuvo fuertes repercusiones sociales y que a partir del nacimiento de Louise Brown, permitió a miles de parejas con problemas de fertilidad tener bebés.

Por Continental, el Dr. Sergio Pascualini del instituto “Halitus” sostuvo que tuvieron que pasar más de treinta años para que llegara un reconocimiento al inventor del sistema de la fecundación in vitro.

Pascualini sostuvo que "las religiones siempre han resistido avances médicos como el de la fertilización asistida".

Agregó que mientras haya una ley pluralista y no restrictiva, los ciudadanos podrán evaluar que decisón tomar de acuerdo a sus creencias religiosas.