“Hay muchos docentes que ganamos 7.000 pesos, pero trabajamos los tres turnos: entre 9 y 12 horas por día. Otro tema del que no se habla es que están cerrando escuelas por la gran deserción escolar”, precisó Graciela Benítez, invitada al piso.

Profesora de Historia de José C. Paz y Licenciada en Ciencias de la Educación, expresó “la voz de los docentes” del conurbano de la provincia de Buenos Aires, en el marco del conflicto del sector por el reclamo de aumento salarial.

“Hay una ley que creó la obligatoriedad de la escuela secundaria pero hace agua”, enfatizó.

“El cierre de cursos, además, significa menos puestos de trabajo”, alertó Benítez, quien precisó que muchos docentes dan clases en aulas con 50 estudiantes.

“Hay un abismo entre lo que figura que tenemos que hacer en la currícula y lo que realmente podemos hacer”, señaló.

Y agregó que suceden cosas como “hacer pasar a chicos con tres materias pendientes y tomarles exámenes también en abril, para que pasen de año por todo esto de la inclusión”.

Benítez aseguró que “el docente no tiene ninguna autoridad: no podemos expulsar, poner amonestaciones o calificar con un 1”.

“Si el director es temeroso de los inspectores, no tenemos ningún mecanismo para ejercer autoridad”, subrayó.

“No existen cambios de conducta: el chico sabe que no hay autoridad docente y lo utiliza muy bien. La educación está colapsando mal”, enfatizó la educadora.

“Solicitamos que no se subvencione a las escuelas privadas”, dijo Benítez, aunque resaltó que existe una suerte de discrecionalidad en la asignación de recursos para escuelas públicas.