La tarjeta, decorada con un fondo de coloridos corazones pide que este 14 de febrero, "festejemos sin violencia, con princesas y príncipes enteros, no medias naranjas, y felices, sin mitos de eterno amor".

"En el día de San Valentín se promueven festejos y celebraciones para las parejas, pero también se plantea todo perfecto, ocultando realidades que tienden a estimular relaciones excluyentes y que dejan a ambos muy vulnerables, promoviendo conductas estereotipadas", dijo Mabel Bianco, presidenta de esta organización.

"Los más jóvenes inician sus primeras relaciones afectivas concibiendo al amor idealizado y donde parece imposible ser uno mismo porque son sólo una mitad que se completa con la otra mitad. Esto tiende a limitar la autoestima en las chicas y a depender de la `otra mitad` para vivir. Los varones tienen, por su socialización, menos tendencia a eso", dijo.