El recuento del Centro de Investigación sobre la Epidemiología de los Desastres (CRED) indica que el año pasado se registraron 317 desastres naturales que afectaron a 94 países. El 87% de ellos estuvo relacionado con el clima, "con lo que se mantiene la tendencia de los últimos 20 años de que los desastres relacionados con el clima superan a aquellos de origen geofísico en los 10 países más afectados por desastres del mundo. Hay pocas dudas respecto de que el cambio climático conducirá a un aumento de la frecuencia y la gravedad de los peligros y de las personas expuestas a ellos", recuerda el informe.

El número de desastres naturales en 2014 fue el más bajo de la década, un 17% por debajo de la media. La sequía fue la responsable del 39% del total de personas afectadas por desastres. Se estima que en 2014 resultaron afectas por desastres cerca de 107 millones de personas y que de ellas 8.186 murieron. El 49% de todos los desastres de 2014 fueron inundaciones y deslizamientos de tierras. Entre los desastres más graves se contaron las inundaciones en India, Pakistán y los Balcanes. Las inundaciones y deslizamientos de tierra fueron responsables del 63% del número total de muertes relacionadas con desastres y del 34% del número total de afectados.

La tasa de mortalidad en los desastres ocurridos en 2014 fue un 90% menor a la media de la pasada década. De hecho, 2014 fue el año con la menor tasa de mortalidad desde 1986. El 48% de los desastres de 2014 ocurrió en Asia, con más del 85% de los muertos y el 86% de los afectados en todo el mundo. Ese repunte asiático se debió al hecho de que no sólo se produjeron más desastres, sino que la tasa de mortalidad en América bajó hasta el 8%, cuando la media en la última década había sido del 25%. China fue el país más afectado por desastres. Las sequías, tormentas e inundaciones afectaron a más de 58 millones de personas, y sólo el terremoto de agosto de 2014 se cobró la vida de 731 personas.

Los desastres de origen tecnológico, que en 2014 causaron 5.884 muertes. El 74% de las muertes debidas a desastres de origen tecnológico se deben a accidentes de transporte. El desastre tecnológico más grave de 2014 fue el hundimiento del ferry Sewol, en Corea del Sur, que mató a 304 personas. Se estima que en 2014, las pérdidas económicas por desastres ascendieron a 99.200 millones de dólares, muy por debajo de la media anual de la última década, que ascendió a 147.000 millones.