Tras el frustrado ataque el ex presidente de Colombia, Álvaro Uribe, llegó al Teatro Gran Rex, donde se encontró una bomba programada que se hubiera detonado a la tarde en plena disertación.

El ex mandatario arribó al lugar en medio de un fuerte operativo de seguridad y disertó durante una hora y media sin hacer mención al incidente (ver además Oyarbide ofuscado con versión que minimiza hallazgo de "bomba").

Álvaro Uribe se mostró "muy triste" al conocer la noticia de que había un artefacto en el teatro.

Así lo reveló Martín Pérez Cambet, encargado de Relaciones Institucionales de WOM-Latam, la compañía que trajo al país a Uribe y que se encontraba con el ex mandatario al momento de conocerse la noticia.

Pérez Cambet, además, sobre la base de informaciones de la Policía Federal, negó que el artefacto encontrado ayer tuviera "poder de muerte", como había dicho el juez federal Norberto Oyarbide, quien realizó una inspección al teatro Gran Rex.