Un hombre fue condenado a ocho años y cuatro meses de cárcel por haber atropellado y matado al joven Matías "Pato" Cardozo (23) mientras corría una "picada" de autos en el 2008, en el partido de San Martín.

La condena fue dictada este mediodía por el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 3 de San Martín, que encontró culpable a Víctor Hugo Altamirano (34) por el delito de "homicidio simple con dolo eventual" y ordenó su inmediata detención, ya que había llegado al debate en libertad por una eximición de prisión.

La madre de la víctima, Noemí Romero de Cardozo, consideró que el fallo "fue ejemplificador", porque "los jueces entendieron que se trató de un homicidio simple, tal como quedó asegurado durante el juicio. Estamos mucho más tranquilos, este fallo nos da un poco de paz".

En su alegato de la semana pasada, el fiscal de juicio Rodolfo Domínguez había solicitado al TOC 3 que condene al acusado a la pena de nueve años y medio de prisión por "homicidio simple con dolo eventual" y la inmediata detención del acusado, ya que éste contaba con una eximición de prisión.

En tanto, Diego Ontiveros, abogado de la familia Cardozo, había pedido a los jueces María del Carmen Paz, Miguel Angel Bacalhau y Julián Descalzo que condene a Altamirano a la pena de 10 años y 6 meses de prisión y le aplique una inhabilitación absoluta y perpetua para volver a conducir.

A su turno, el abogado Omar Gauna, defensor de Altamirano, había solicitado al tribunal que condene al acusado a tres años de prisión en suspenso pero por "homicidio culposo", un delito mucho más leve que castiga con penas de seis meses a cinco años de prisión.

El hecho ocurrió la noche del 16 de junio de 2008, cuando "Pato" Cardozo iba hacia una estación de servicio a comprar una tarjeta de teléfono celular para llamar a su novia.

Cuando se disponía a cruzar la avenida Presidente Perón, esquina Alvear, aparecieron tres vehículos que presuntamente venían corriendo una picada callejera y pasaron en rojo.

Uno de los coches sobrepasó por la izquierda a un auto que respetaba el semáforo, mientras que el Fiat que conducía Altamirano lo hizo por la derecha, de contramano, y atropelló a Cardozo cuando cruzaba por la mitad de la avenida.

El joven fue lanzado a más de 30 metros del lugar, sobre la vereda, y el conductor escapó, sin asistirlo.

Según testigos, Altamirano cruzó varios semáforos en rojo para escapar del lugar e incluso pasó por un destacamento de la Policía Buenos Aires 2 con el auto destrozado, echando humo, el parabrisas roto y una gran pérdida de aceite, aunque nadie lo detuvo.

El acusado se mantuvo prófugo durante tres meses y, cuando se le concedió una eximición de prisión, se presentó ante la fiscalía actuante y se negó a declarar.